La crisis financiera mundial ha afectado a las economías occidentales, una de las señales son las reducciones de emisiones de CO2. Las emisiones de Reino Unido fueron un 8,6% menos en 2009 que en 2008. En EE UU, Japón, Francia, Alemania y la mayoría de países industrializados obtuvieron cifras similares.
Sin embargo, las economías emergentes experimentaron una fuerte ganancia económica a pesar de la crisis y registraron importantes aumentos de emisiones de CO2 (China un 8% más, e India un 6,2% más).
Por ello, a pesar de la crisis financiera, las emisiones globales de CO2 producidas por la quema de combustible fósil estaban en 2009 sólo un 1,3% por debajo de las cifras récord de 2008. Esto supone menos de la mitad de la reducción predicha hace un año. “Esto se debe a que la caída del Producto Interior Bruto (PIB) fue menor de lo previsto y la intensidad del carbono del PIB del mundo, que es la cantidad de CO2 emitido por unidad de PIB, aumentó sólo un 0,7% en 2009; muy por debajo de su media a largo plazo de un 1,7% al año”, explica Pierre Friedlingstein, autor principal, e investigador en la Universidad de Exeter (Reino Unido).
Según el estudio, que se ha publicado en la revista Nature Geoscience, las escasas mejoras en la intensidad del carbono fueron provocadas por una mayor proporción de emisiones de CO2 de combustible fósil producidas por las economías emergentes, con una dependencia cada vez mayor del carbón.
Los investigadores pronostican que si el crecimiento de la economía sigue las espectativas, las emisiones globales de combustible fósil aumentarán más de un 3% en 2010, y se acercarán a tasas de crecimiento de las emisiones más altas que las observadas desde el año 2000 hasta el 2008.