(La Nación) El Ministerio de Salud de la Nación avanza en la clarificación de la ley 26.862, que reglamenta la cobertura de la reproducción medicamente asistida. Ya se evaluó y se oficializará próximamente el límite máximo de edad para cubrir los tratamientos de fertilización in vitro. De hecho se está redactando la resolución que establece que cuando la técnica involucre el uso de óvulos propios, la edad máxima será de 43 años. Mientras que para los casos en los que se utilicen óvulos donados, se extenderá hasta los 50.
A partir de la ley, sancionada en julio de 2013, el Estado garantizó “el acceso integral a los procedimientos y las técnicas médico-asistenciales de reproducción médicamente asistida” para toda persona mayor de edad. Sin embargo, desde el Ministerio de Salud de la Nación consideran que la ley es imprecisa y da lugar a distintas interpretaciones, que generan un sinfín de conflictos entre quienes necesitan someterse a los tratamientos y las obras sociales o empresas de medicina prepaga. Frente a esto, el ministerio empezó a revisar lo que consideran vacíos de la norma.
“Es importante discutir y clarificar varios temas dentro de la reglamentación de reproducción medicamente asistida. Estamos trabajando mucho en eso”, dice el coordinador general del Programa Nacional de Reproducción Médicamente Asistida, Nicolás Neuspiller. Y agrega: “Actualmente está en redacción la resolución que fija la edad máxima para cubrir el tratamiento; será de 43 años más 365 días, para tratamientos con óvulos propios, y de 50, más 365 días para tratamientos con óvulos donados”.
El presidente de la Sociedad Argentina de Medicina Reproductiva (Samer), Gustavo Botti, coincide: “El máximo de 43 años para tratamientos con óvulos propios es por un tema de calidad ovocitaria, y en el caso de ovodonación es para proteger la salud femenina”.
“Probablemente la conclusión que se sacó para fijar un límite de edad es la opinión de los especialistas en fertilidad y también las tendencias a nivel mundial. Seguramente estaremos acompañando la decisión”, justifica Gisella Canton, presidenta de Concebir, organización que agrupa a los pacientes con trastornos de la reproducción.
“Un 15% de las parejas tienen problemas para quedar embarazadas en forma natural”, dice Botti. Y aclara que debe pasar un año de intentar concebir de manera natural, para poder dar un diagnóstico de infertilidad. El Registro Argentino de Fertilización Asistida (RAFA) indica que, desde 2004 hasta 2014, se iniciaron 62.961 ciclos de procedimientos de fertilización in vitro, con una tasa de embarazos logrados de 24,03 por ciento.