(El Cronista) En un mes en el que hubo varios cambios de manos dentro de la industria farmacéutica, ayer se conoció un acuerdo por el que un laboratorio argentino que había sido vendido a una compañía extranjera vuelve a manos nacionales, y prácticamente a las mismas. Elea, la firma encabezada por Hugo Sigman, Daniel Sielecki y Luis Gold, anunció que adquirirá Phoenix, una compañía que hoy es propiedad del grupo británico GSK en Argentina. Si bien no trascendió el monto de la operación por cuestiones de confidencialidad del contrato, para dar una idea de la magnitud de la adquisición, en el mercado se recuerda que hace siete años para comprar Phoenix justamente a la familia Sielecki que era su propietaria, GSK había invertido más de u$s 250 millones. Sin embargo, la nueva operación sería por una cifra inferior.
La compra conocida ayer se concretará en forma definitiva antes de fin de año, tras cumplirse por ambas partes distintas acciones y condiciones a las que se encuentra sujeta. Técnicamente, GSK transferirá el 100% de sus acciones en Laboratorios Phoenix y su negocio de productos genéricos de marca en Argentina.
La venta incluye la planta de producción en Villa de Mayo, las oficinas comerciales y laboratorios de calidad e investigación y desarrollo ubicados en Buenos Aires, así como la cartera de productos de Phoenix, entre ellos el popular Pervinox. Para Elea, la incorporación de este nuevo laboratorio es importante dado que la posiciona con amplia capacidad de producción en el mercado de los genéricos aún cuando no cambia su posición en el mercado general nacional de medicamentos.
Oficialmente, las firmas también comunicaron que los empleados continuarán en Phoenix como parte de la operatoria de transferencia, por lo que unas 700 personas ingresarán a las filas de Elea.
Desde GSK, informaron que “la venta se corresponde con la estrategia global de simplificación de GSK a través de la focalización en áreas terapéuticas centrales. Asimismo, permitir a GSK enfocarse en el desarrollo de su cartera de productos innovadores, de relevancia fundamental en la estrategia de crecimiento de la empresa en el país y a nivel global”.
Rodolfo Civale, VP y gerente general de GSK Argentina y Cono Sur, confirmó que “en línea con la nueva dirección global de GSK y las nuevas decisiones estratégicas, estamos cambiando el foco hacia el fortalecimiento de nuestra cartera de productos innovadores. Durante los últimos siete años, Phoenix ha sido una parte importante de nuestro negocio en Argentina. Hoy creemos que es el momento indicado de transferir el negocio Elea, con una establecida trayectoria en el mercado local”, señaló.
Elea cuenta con plantas industriales de producción orientada principalmente en las áreas de salud femenina, cardiología, neurociencias, oncología y venta libre. En este último segmento, produce marcas de uso masivo como el Caladryl, el Evatest o el Nopucid, entre otras. GSK es una de las empresas farmacéuticas y de salud líder en el mundo en el campo de la investigación. Se encuentra en el país hace 95 años y más allá de desprenderse de Phoenis, sigue un plan de inversión por $ 1000 millones durante cinco años en un centro regional de investigación y desarrollo para la realización de ensayos clínicos, que será uno de los tres centros regionales de la firma en América latina.