(Infobae) El ministro de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, Fernán Quirós, no adelantó que tipo de medidas implementará el distrito a partir del 21 de mayo, pero reconoció que “luego de tanto dolor, es muy difícil pedir un mayor esfuerzo”. Al mismo tiempo, el funcionario admitió que las próxima dos semanas será una bisagra tanto en la campaña de vacunación contra el COVID como en lo que hace a la evolución de la curva de casos en CABA.
“Lo que estamos viendo es que los fríos nos han llevado hacia adentro y nos cuesta mucho sostener la decisión y necesidad de seguir sin vincularnos con alguien que no convivimos”, dijo el funcionario y retiró la estrategia del gobierno: cuidar a los trabajadores de la salud, que están cansados, e intensificar los testeos, rastreos y la vacunación.
Quirós aseguró este martes que la Ciudad aún no ha tomado una decisión respecto a las nuevas restricciones (el 21 de mayo vence el DNU del gobierno nacional), y que seguirá observar estos días hasta el viernes para ver si el cambio de tendencia en la cantidad de casos positivos se confirma o vuelve a descender. Sin embargo, afirmó: “Luego de tanto dolor es muy difícil pedir mayor esfuerzo”.
Asimismo, el ministro de Salud porteño aseguró que la campaña de vacunación se va a intensificar significativamente a partir de la semana que viene: “Las próximas dos semanas van a ser semanas muy bisagra en la campaña de vacunación y en la curva de la pandemia en la Ciudad de Buenos Aires”.
Quirós reiteró que en la actualidad “los nuevos focos de contagios se registran en lugares cerrados, pequeños, mal ventilados o sin ventilación, donde la gente se junta con personas con las que no convive y pasa más de 15 minutos”.
“El invierno genera curva de casos; naturalmente estamos con gente, nos encerramos en un living u oficina, y nos cerramos porque hace frío. Por eso tenemos que evitar al máximo encontramos con gente que no convivimos”, enfatizó Quirós y ratificó que el espacio abierto es 20 veces menos contagiante que los lugares cerrados.