(Tiempo Argentino) En la Argentina entre el 28% al 30% de los casos de muerte materna se debe a complicaciones por abortos inseguros”, aseguró Silvina Ramos miembro de la Alianza Argentina para la salud de la madre, recién nacido y niño (ASUMEN) durante la Jornada-Debate sobre la situación de la mortalidad materna en Argentina. Las cifras coinciden con las informadas por el informe “Género en cifras: mujeres y varones en la sociedad argentina”, presentado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Las segundas causas de mortalidad materna son las hemorragias y las sepsis.
Estimaciones de la OMS indican que hubo progresos en la disminución de las muertes maternas a escala global entre 1990 y 2010. Aun así, los avances para alcanzar la meta propuesta en el Objetivo del Milenio 5 (ODM %) de reducir las muertes maternas en tres cuartas partes para 2015 fueron lentos, dispares y algunos países, entre ellos la Argentina está lejos de lograrlo. En el país hace 20 años que la mortalidad materna no desciende, y de continuar con esta tendencia, no será posible cumplir con el compromiso asumido frente a los Objetivos del Milenio (ODM) de Naciones Unidas de llegar a la tasa de 13 por 100 mil nacidos vivos. La tasa de mortalidad materna en 2011 fue de 44 por cada 100 mil nacidos vivos, y en 1990 de 52 en la misma escala. Para responder con la meta, la Argentina hubiera requerido un descenso anual del 5,4% que le permita llegar a una razón de Mortalidad Materna de 13 por 100 mil nacidos vivos. De continuar el ritmo, la mortalidad materna para el 2015 será de 42,6 por 100 mil nacidos vivos tres veces más que la meta.
“La tendencia se ha amesetado con algunas variaciones por año y es preocupante. Debemos proponer nuevas políticas para disminuir la tasa como: la legalización del aborto, que disminuiría las muertes relacionadas con las complicaciones del aborto inseguro y llevar adelante políticas más consistentes en el manejo de la emergencia obstétrica, qué hacer cuando sucede una emergencia, cómo manejar un episodio de hipertensión (clampsia) por ejemplo que en muchos casos no se sabe cómo actuar”, explicó Ramos a este diario.
“Durante muchos años creímos que el esfuerzo del control prenatal era suficiente y se dejaba de lado el parto”, explicó Ricardo Fescina Ricardo Fescina, Director Ejecutivo del Centro Latinoamericano de Perinatología y Desarrollo Humano (CLAP-OMS/OPS) y coordinador del Programa de Salud de la Mujer y Reproductiva de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) Con respecto a la problemática alrededor del parto, Fescina aseguró que “en la Argentina durante mucho tiempo estuvo prohibido el divorcio, la gente igual se separaba. La ley iba para un lado y el comportamiento social por otro. Tenemos ley para adoptar, pero no estamos obligados a hacerlo. Si se despenaliza el aborto no se obliga a abortar. No se trata de estar a favor del aborto, sino de respetar la decisión de los demás.”