Por ese motivo, el texto oficial argumentó que esa intervención genera “una innecesaria superposición de cometidos y funciones públicas, en detrimento de la simplicidad de los trámites administrativos”.
“En razón de ello, con el fin de lograr una más ágil y fluida operatoria, corresponde centralizar las actuales competencias en un número menor de jurisdicciones”, añadió.
En ese sentido, explicó que de ahora en más, la Superintendencia de Servicios de Salud “tendrá la atribución especifica de intervenir, conjuntamente con el Ministerio de Salud y Desarrollo Social, en el procedimiento de autorizaciones de incrementos de cuotas y valores diferenciales, fijándole un plazo razonable para adoptar una resolución a los requerimientos que se presenten”.
Desde 2011, las empresas del sector elevaban el requerimiento para incrementar las cuotas a la Superintendencia, que a su vez lo derivaba al Ministerio de Salud para su aprobación, “previo dictamen vinculante” de la Secretaría Comercio Interior.