Una buena noche de sueño es tan importante como el ejercicio regular y una dieta saludable. Investigaciones de la Universidad de Illinois muestran que la falta de sueño tiene efectos negativos inmediatos en las hormonas, el rendimiento del ejercicio y la función cerebral, incluso puede causar aumento de peso y el riesgo de enfermedades tanto en adultos como en niños.
A continuación, la Dra. María Celia Daraio, especialista en Medicina del Sueño de DIM CENTROS DE SALUD (MP 444369 // MN 77713), señala las 10 claves para un sueño de buena calidad:
1- Una buena noche de sueño empieza al despertarse: si mantienes el horario de levantarte relativamente fijo, independientemente de la noche pasada o de como cambien tus rutinas durante la semana tu sueño nocturno se verá favorecido.
2- Organiza tu día para respetar los horarios de las comidas y trata que estas pausas se realicen de manera tranquila interrumpiendo en ese momento la actividad laboral y las pantallas. De ser posible comparte ese momento con algún familiar o amistad.
3- Recuerda desayunar como un rey, almorzar como un príncipe y cenar como un mendigo, esta última comida que no esté muy alejada del momento que cae el sol.
4- Reserva un momento en el día para realizar alguna actividad física, aeróbica o de elongación, de ser posible antes que se esconda el sol. En el caso que tengas sobrepeso la Sociedad Argentina de Cardiología recomienda 250 minutos/semana de actividad aeróbica para descenso de peso.
5- A partir de las 16 o 17 hs. te recomendamos que suspendas el consumo de estimulantes como el café, mate, te, chocolate y bebidas cola. Puedes consumir descafeinados, infusiones de hierbas, agua, lácteos y bebidas frutales. Recuerda que cuanto más tarde tomes líquidos ello podrá despertarte de noche al aumentar la diuresis.
6- Si tienes que trabajar con pantallas utiliza bloqueadores de luz azul a partir de la caída del sol y disminuye la intensidad de la iluminación artificial.
7- Entre 1 y 2 horas antes de irte a dormir, interrumpe todo contacto con las pantallas, deja de trabajar y prepárate para ir a descansar.
8- Realiza alguna actividad relajante fuera de la cama: lee, medita, respira o solo escucha música relajante por unos minutos. Si las preocupaciones inundan tus pensamientos, escríbelas en un papel o haz un mapa de actividades para el día siguiente.
9- El momento de irte a dormir lo establece tu necesidad de sueño y no debe ser más de 7-8 horas del momento que irás a despertarte.
10- Y recuerda, la cama solo es para dormir y para los encuentros íntimos. Si te sientes desvelado, sal de la cama y retoma alguna actividad de relajación o lectura fuera de la misma hasta que sientas sueño nuevamente para volver a dormir.
Por la Dra. María Celia Daraio
Especialista en Medicina del Sueño de DIM CENTROS DE SALUD
(MP 444369 // MN 77713)