(Redacción Médica) Los investigadores analizaron la orina de 348 pacientes de esta enfermedad con una proteína defectuosa llamada TERT, y esto fue capaz de predecir cuándo el cáncer estaba a punto de regresar en más del 80 por ciento de los casos. El método estándar, conocido como citología, detectó la recaída en sólo el 34 por ciento de los pacientes.
El test detectó cómo la enfermedade aún no se había propagado a la pared del músculo, antes incluso de que lo hiciera la citología, lo que podría ayudar a los médicos a iniciar el tratamiento antes de que aparezcan los síntomas. Además, TERT distinguía el cáncer de las infecciones del tracto urinario. Según el investigador del Hospital Universitario del Instituto de Oncología de Lyon, Alain Ruffion, “el hecho de que la prueba no reaccione a las infecciones del tracto urinario es muy interesante porque demuestra que es fiable y poco dado a resultados engañosos”.
En ese sentido, el especialista explica que “la prueba de citología estándar necesita un médico que mira un microscopio para leer los resultados, pero la prueba TERT es analizada por una máquina que es más simple y precisa. Aunque ahora cueste un poco más que los métodos estándar, es probable que salga más barata con el tiempo”.
El descubrimiento también sugiere que se necesita llevar a cabo otros análisis para entender más sobre el papel que las defectos TERT juegan en el cáncer de vejiga.