(El Mundo-EFE) Un equipo de investigadores del Vall D’Hebron Institut de Recerca (VHIR) junto con el CIBER de Cáncer (Ciberonc) ha identificado el papel de la proteína integrina B3 en la metástasis de cáncer de mama, por lo que podría ser “una diana terapéutica” para evitar la propagación de la enfermedad a otros órganos del cuerpo.
El doctor Stefan Hümmer, investigador del VHIR y del Ciberonc y uno de los autores del trabajo, ha señalado que el estudio es uno de los primeros “que describe las vías que permiten que estas vesículas entren en las células para favorecer el crecimiento tumoral y el papel que la integrina B3 juega en este proceso”.
Este mecanismo de entrada a las células se ha observado con anterioridad en virus herpes cuando entran en células humanas, una similitud que ha ayudado a los investigadores a conocer y estudiar esta vía de entrada.
Tras este hallazgo, el grupo está trabajando ahora en la búsqueda de inhibidores de la integrina B3, lo que sería una “posible estrategia” para evitar las metástasis.
“Estos inhibidores serían específicos para el control de las metástasis. Por eso, deberían administrarse conjuntamente con otros tratamientos dirigidos al tumor primario”, ha añadido el doctor Ramón y Cajal.