El Ministerio de Salud de la Nación realizó una reunión de expertos con el objetivo de analizar la situación en Argentina de las helmintiasis – lombrices y otros parásitos que se contaminan desde el suelo – y relanzar, con el apoyo de la OPS/OMS, su estrategia nacional contra esta clase de enfermedades.
La apertura del encuentro, que se realizó en la sede de la cartera sanitaria, fue encabezada por la subsecretaria de Prevención y Control de Riesgos del Ministerio de Salud, Marina Kosacoff, y el representante de la OPS/OMS en Argentina, Pier Paolo Balladelli.
“Es muy oportuna esta renovada atención del Ministerio de Salud de la Nación para un programas que aumentará la equidad en salud en Argentina – señaló Balladelli. A pesar de que la preocupación por los daños a la salud determinados por las helmintiasis no está muy presente en los medios de comunicación, este nuevo plan del Ministerio con la OPS podrá eliminar un riesgo muy importante de los grupos más afectados que son los niños y de las mujeres durante el embarazo”.
Luego de precisar que “a nivel mundial las helmintiasis afectan aproximadamente a 1.500 millones de personas”, el representante de la OPS/OMS dijo que “pertenecen al grupo de las enfermedades olvidadas o desatendidas, que están directamente relacionadas con la pobreza”. En Argentina enferman a las poblaciones de las regiones del Noreste y el Noroeste, que son las de menor desarrollo en materia de saneamiento básico.
La reunión también contó con la participación de especialistas del Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas, investigadores de diferentes provincias, representantes de universidades nacionales y miembros de organizaciones de la sociedad civil relacionadas con esta temática.
“La meta es eliminar las helmintiasis a nivel global en 2020 y Argentina está en condiciones de alcanzarla. Vamos a brindar todo nuestro apoyo para trabajar en un plan y que haya los recursos necesarios para la desparasitación, la educación sanitaria y la mejora de las condiciones de saneamiento. En este encuentro percibo un renovado entusiasmo profesional, ético, político y estratégico”, remarcó Balladelli.
Por su parte, Kosacoff aseguró: “El Ministerio de Salud ha implementado iniciativas anteriores para prevenir y combatir estas enfermedades, por lo cual ahora queremos sumar esfuerzos para armar una estrategia y lograr la eliminación de las helmintiasis en 2020. Es fundamental que contemos con un mapeo e información confiable sobre la incidencia de estas patologías para adoptar acciones consensuadas con las sociedades científicas, la sociedad civil, las provincias y diferentes actores gubernamentales”.
Información sobre las helmintiasis transmitidas por el suelo
Son una de las parasitosis más comunes en todo el mundo y afectan a las comunidades más pobres y desfavorecidas. Son transmitidas por los huevecillos de los parásitos eliminados con las heces fecales de las personas infestadas, los que a su vez contaminan el suelo en zonas donde el saneamiento es deficiente. Las principales especies de helmintos transmitidos por el suelo que infectan al hombre son la ascáride (Ascaris lumbricoides), el tricocéfalo (Trichuris trichiura) y el anquilostoma (Necator americanus) y (Ancylostoma duodenale).
Distribución y prevalencia
En todo el mundo, aproximadamente 1.500 millones de personas, casi el 24% de la población mundial, está infectada por helmintos transmitidos por el suelo. Las helmintiasis transmitidas por el suelo están ampliamente distribuidas por las zonas tropicales y subtropicales, especialmente en el África subsahariana, América, China y Asia oriental.
Más de 270 millones de niños en edad preescolar y más de 600 millones en edad escolar viven en zonas con intensa transmisión de esos parásitos y necesitan tratamiento e intervenciones preventivas. Los niños infectados sufren deterioro físico, nutricional y cognitivo.
Meta mundial
Consiste en eliminar la morbilidad causada por las helmintiasis transmitidas por el suelo en los niños de aquí a 2020. Ello se logrará mediante el tratamiento periódico de al menos el 75% de los niños en las zonas endémicas (según los cálculos, unos 873 millones).